Estragos del desarrollismo
- 20
- Feb
Entre las gentes mínimamente interesadas por el patrimonio histórico, pocos periodos hay que susciten una repulsa tan unánime como el que conocemos bajo el epígrafe de «desarrollismo». Todos estaríamos de acuerdo en situar el inicio de esta etapa en los años sesenta, momento a partir del cual muchas ciudades y pueblos inician un rápido crecimiento demográfico y económico que se traduce en una rápida metamorfosis de los núcleos urbanos. Los terribles estragos en el paisaje y el patrimonio histórico se sucederán con tal velocidad que en unos pocos lustros puede hablarse de un antes y un después.